El bombillo ha pasado por un largo proceso que empezó en 2009, con la llegada de Perrone, que no hacía el fútbol que le agradaba al hincha eléctrico, pero al menos se le dieron los resultados al principio.
Luego hombres claves se lesionaron, y el equipo bajó su rendimiento. Sampaoli tomó la posta en 2010, luego de un comienzo errático, se reivindicó con una seguidilla de victorias, ganando los 2 clásicos de la primera etapa; con Ayoví como goleador del campeonato, se quedó a apenas 2 puntos de ser campeón directo, y perdió en esas fatídicas finales. Asad vino en 2011, para continuar ese camino de éxito, y realmente el bombillo lo consiguió: Esa etapa apenas perdió 2 partidos, con la valla menos vencida de estos 5 años, solo le encajaron 15 goles.
Aparentemente, las cosas daban para un Emelec campeón, y con un funcionamiento mejor. Juan Ramón Carrasco llegó siendo campeón en Uruguay con Nacional, mas acá nunca pegó. En la segunda etapa el equipo eléctrico fue una de cal, y una de arena, forzándolo a jugar una final con Deportivo Quito que venía en alza, mientras que Emelec se hundía. Para tratar de salvar esta situación, se eligió a Fleitas, que hasta ese mes era zaguero azul, como director técnico; su inexperiencia no pudo con una final, los chullas ganaron ambas.
De ahí en 2012, Emelec tuvo muchos tumbos, no evolucionó en su juego, se apeló más a la camiseta; no obstante con jugadores claves lesionados en la segunda etapa con Quinteros, el equipo no se pudo levantar y esta vez no se pudo llegar ni siquiera a una hipotética final.
En 2013, el equipo millonario, retoma el camino de la evolución, del progreso. Es el mejor primer semestre por números, en lo que va de esta dirigencia. No hay "diez", porque es raro encontrar uno barato en sudamérica, pero esa función la cumplen Gaibor, Mena y Pedro Quiñónez: Ellos lanzan pases frontales entre líneas, ejecutan tiros libres, tiros de larga distancia, y encima ayudan a la contención. Por los costados es muy prolijo, con un Valencia recuperado, y un Narváez que sube incesantemente por la derecha; y por la izquierda Bagui que sigue aprendiendo, se comprende bien con el que le toque. En la delantera. Mondaini se vuelve a recuperar, y hemos visto al mejor Marlon de Jesús desde que llegó a Emelec: En 2 partidos, de 8 oportunidades metió 3 goles, y puso 2 veces a sus compañeros en ocasión de anotar; un promedio muy respetable, si así llueve...
No digo que Emelec haya progresado solo porque gane, lo digo porque se lo ve en el entorno. Dije al inicio de la temporada, que al buen técnico se lo conoce porque mejora el rendimiento de los jugadores: el Gaibor de Sampaoli regresó, y potenciado, porque ahora cobra tiros libres. El Valencia que se desapareció después de 2011, Bagui ahora hasta centra, Pedro Quiñonez es más limpio para quitar la pelota, Marlon ha mejorado bastante en efectividad, en lo que se le ha visto en esta segunda etapa. Y así podría analizar jugador por jugador, a una plantilla que se la ve interesante, que da incluso que soñar en que todavía no llega a su techo, ya que el promedio de edad es bajo en los titulares, Son jugadores jóvenes, pero maduros, con experiencia en partidos decisivos en finales, y solo saben una cosa: No quieren volver a jugar una.
Emelec lleva 16 partidos ganados en campeonato, de 24 jugados. De los 6 últimos cotejos, ganó 5.
Ha empezado como la primera etapa, ganando 2 partidos seguidos, haciendo 3 y 4 goles respectivamente.
Marlon de Jesús, se puso a 2 goles del segundo goleador: Laurito.
El bombillo lleva invicto 6 juegos.
El promedio de edad de la alineación titular (Dreer; Narváez, Nasuti, Achilier y Bagui; P.Quiñonez, Gaibor, Mena y Valencia; Mondaini y De Jesús) es de 26 años, siendo el más veterano Esteban Dreer con 32 años.
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